Capitulo 20

El entro las manos en su bolsillo, sacando de allí una pequeña navaja. Con ayuda de esta empezó a cortar su pantalón, quizás para tener mayor comodidad.

-Siempre hay que estar preparado-me miro y me sonrió. Yo aun seguía sin poder decir nada con semejante espectáculo que acababa de ver.-Que tengo?-me hizo reaccionar chocando sus dedos.
-No, no tienes nada.

-Porque te quedas como tonta mirándome entonces?

-No te miraba a ti, miraba al techo.

-Si claro-Me dijo con sarcasmo.

-Ya no vayas a empezar impertinente-le dije.

No me dijo mas nada.

La noche no duro mucho en llegar, de un momento a otro todo estuvo oscuro, solo se oían las olas del mar dando un ambiente de calma. Recosté mi cuerpo en la pequeña cama improvisada, no era tan incómoda como pensada, no era como mi cama pero me sentía bien allí. Ray estaba a mi lado y dormía plácidamente, pues igual que yo estaba muy cansado. No tarde mucho en caer rendida.

El sol del siguiente día en mis ojos me hizo despertarme. Mire a mi lado para ver a Ray pero ya no estaba ahí. Me asuste mucho al pensar que quizás lo había venido a rescatar y me había dejado allí. Salí a ver si lo veía, pero no estaba, mi miedo se fue incrementando. Solo de pensar que me había dejado me daban escalofríos.

Pero después sentí un alivio al verlo venir hacia mí. Pude respirar más tranquila.

-Buenos días-le dije.

-Buenos días- me contesto.

-Oye que eso eso que se ve en playa?
-Qué? No se
-Parece equipaje, Ray creo que son nuestras maletas.

Nos acercamos y efectivamente era parte nuestro equipaje que al parecer había sobrevivido al accidente y flotaba en el mar. Me puse muy Feliz porque ya podría quitarme un poco la mugre y la incomodidad que tenia encima. Tome mis cosas y entre al refugio, la ropa estaba mojada y de mas pero por lo menos tenia alguito. Saque mi jabón y un cepillo de dientes que siempre tenía.

-______ encontré un rio hoy que esta riquísimo, si quieres te llevo-me ofreció Ray.

-Si gracias seria bien.

Fuimos hasta allí de verdad todo se veía majestuoso, era todo hermoso, el rio tenía una cascada Preciosa. Ni pensar que nadie hubiera visto aquella isla tan hermosa. Pedí mi espacio a Ray para poder hacer mis cosas. El se fue sin decir nada y me dio mi espacio. Después que termine todo lo mío, me encamine de vuelta al refugio.


Al llegar estaba Ray con dos pecados en ambas manos, eran bien grandes. Los dejo caer al suelo al verme, comenzó a mirarme de arriba a abajo.

-Que hermosa te vez.

-Enserio?-Llevaba unos pantalones cortos que por suerte había entrado unos en mi maleta, una blusa de tiros y unas sandalias. Tenía el pelo mojado al descuido, cosa que no me hacía sentirme bella.

-Si te ves Preciosa-se sonrojo y se acerco a mi y me dio un pequeño beso en la boca

- Ya empiezas tu con tus cosas, no me vuelvas a besar, okey?-le reclame.

-Ya está bien, es que eres hermosa no puedo evitarlo.-me miraba con deseo.

-Y esos pecados?-le dije, tratando de cambiar el tema.

-Son para la Noche.-me contesto.

-Los comeremos crudos!!!-puse cara de asco.

-Claro que no, tenemos que buscar algo para hacer el fuego.

-Ya entiendo. Pero muero de hambre ahora-puse las manos en mi estomago-No hay nada de comer?.

-Si, en el refugio te deje coco y algunas cosas más, puedes comer lo que quieras, después vienes para que busquemos las cosas para encender el fuego.

-Está bien.

Comí todo lo que me había guardado y después salí con él en buscar de los materiales para encender el fuego.

-Busca ramas secas de este lado, yo ire del otro-me indico.

Empecé a recoger las ramas secas que veía y las sostenía con los brazos. De pronto vino Ray detrás de mí y hizo una sonido que me hizo asustarme mucho. El se moría de la risa y empezó a correr, yo comencé a perseguirlo para cobrármelas, pero me resbale, cayéndome de una manera muy fea y aparatosa. Cuando intente incorporarme se me hizo imposible me dolía mucho el pie izquierdo, por lo que solté un grito de dolor espantoso.

El al verme tirada en el suelo llorando, acudió a mí rápidamente, tenía cara de preocupación.

-Estas bien?-me pregunto.

-No, no estoy bien, es que acaso no ves lo que me acabas de hacer, eres un Estúpido Raymond-le dije de mala forma.

-Solo era una broma no pensé que esto iba a pasar, perdón-bajo el rostro apenado.

Me tomo entre sus brazos y me cargo hasta nuestro refugio, me recostó de mi camita improvisada. Tomo de la ropa que estaba en mi maleta y la puso en mi cabeza para que me sirviera de almohada y en mi pie para acomodarlo

-Te voy a revisar el pie así que tranquila-me dijo.

-NO!!!-le grite-No me toques el pie me duele mucho y me da miedo.

-Tengo que revisártelo _______, tengo que ver si te fracturaste o solo fue un golpe.

-Pero no quiero no eres medico ni nada que se le parezca. Y si lo empeoras?. Hay No, no me toques-Empecé a hablar rápido.

-CALLATE!!!-me grito, haciendo que me sobresaltara-Perdón pero es que me desesperas cuando hablas así. Mira yo no soy Doctor ni nada pero es fácil saber si te paso algo o no. Además no te preocupes te tocare suavecito, está bien?

-Está bien, pero despacio por favor.

El coloco sus dedos en mi pie. Con delicadeza lo iba acariciando. El contacto de sus dedos me hacia estremecer. De un momento a otro movió mi pie con rapidez. El hueso emitió un sonido, como un "Crack", me dolió mucho, lo cual me hizo gritar fuerte.

-Que me hiciste?-Exigí saber.

-Tu hueso estaba doblado así que lo enderece. Con lo que te hare ahora no te seguirá doliendo.

Era cierto, se me paso el dolor porque me daba un rico masaje en el pie. Tomo una camiseta que tenia y la corto en varios pedazos, me vendo el pie con delicadeza y me dio un pequeño besito en el dedo pulgar.

-Ya estas lista-me sonrió-Te sientes mejor?

-Si mucho mejor, Gracias. Como sabes tanto?, hasta pareces doctor.

-Es que una vez tome un cursillo de enfermería y me enseñaron lo básico.

-Sabes de todo.
 
-Es que soy Versátil mami -me guiño el ojo-Iré a buscar las cosas para hacer el pescado, quédate aquí tranquila-Se acerco y me beso en la frente.

Salió y me dejo allí acostada. No sentía dolor alguno en mi pie, no sé que me había hecho pero me había calmado el dolor que sentía.

Mientras en Puerto Rico...

Ya todos estaban preocupados por el accidente, algunos decían que _______ y Raymond estaban muertos y otros que quizás podrían estar vivos.

-Dios mio quiero que mi papa regrese, no quiero que le pase nada malo-Era su hija Yamilette quien lloraba abrazada de su tío Nomar.

-Tranquila Yami, ya están investigando que fue lo que paso. Tenemos fe en que estan vivos, él y también _________ su relacionista.

-Ojala estén vivos, pero al que quiero es a mi papa, lo extraño mucho- se le quebró la voz al pronunciar la última palabra. Nomar también lloraba desconsolado.

Paulina también estaba muy preocupada por su hermana. Había recibido la llamada de Nomar de lo que había pasado y estaba desconsolada, su hermana era lo único que tenia y lo que más amaba.

Mientras en la isla...

Escuchaba a Ray afuera chasqueando unas rocas para poder hacer chispas para que hubiera fuego. También oí como grito de felicidad al lograr encenderlo. Después de un Rato entro al refugio con un poco de pescado en las manos.

-Toma prueba esta rico-Me brindo.

Tome un poco y lo pobre de verdad estaba delicioso.

-Quieres más?

-Si-le dije.

-Ven te ayudo para que puedas salir y comamos a gusto.

Me ayudo a incorporarme y me cargo para salir a comer, yo estaba acurrucada en su pecho al descubrierto. Me sentó cerca de la fogata, pues estaba un poco frio afuera.